El Movimiento Patriótico Libre ve con gran preocupación la sangrienta escena en la provincia siria de Sweida, ya que indica una sedición planificada con el objetivo de sumir a Siria en un conflicto interno abierto que golpee su diverso tejido social y desplace a parte de su pueblo.
El movimiento considera que el Líbano no se librará de las repercusiones de lo que está ocurriendo en Siria, por lo que hace un llamamiento a todos los libaneses para que se unan en torno al Estado y protejan su paz civil.
El movimiento condena y rechaza el ataque contra los drusos en Sweida, que forma parte de un proceso criminal que asola Siria con todos sus componentes desde el comienzo de la guerra.
El movimiento subraya también que el retorno de la paz y la estabilidad a Siria comienza por el cese de las injerencias extranjeras y la instauración de un Estado que respete la diversidad y preserve las libertades públicas.